Sin duda Crimen y Castigo tiene un puesto ganando como uno de los mejores libros de la literatura universal, el modo en como plantean la historia, aventurándose en la psicología humana lo convierte en una obra que puede tocar muchas fibras sensibles en los lectores.
El arco argumental nos plantea a Rodion Raskolnikov un joven ex estudiante de derecho que deprimido de su vida y harto de la usurera que lo maltrata, da paseos por toda la ciudad, para así alejarse de todo los males que pasaba en la habitación donde residía. Un día arto de los tratos de esta anciana, él decide matarla con un hacha, su hermana estaba asomando ahí y por eso también la asesina.
La obra nos plantea el crimen como modo de haber hecho un favor al mundo y el castigo no desde el punto de vista social ni judicial, sino de la perspectiva del asesino que en este caso es Rodion, Dostoievski nos demuestra con el pasar de los hechos como es que la conciencia es la peor castigadora que puede existir, que a pesar de sus ideales de que hay personas que están destinadas a matar por tener un "mayor rango" no se puede negar que su mente no podía contra tal hecho, la historia llega a un punto que se vuelve tensa, cuando el comisario prácticamente descubre que él es el asesino y que intentar ocultarlo era inutil.
El clímax llega en el momento que Raskolnikov ya no puede más con su conciencia y llega a contarle a Sonia su novia en ese momento, él está en el dilema si fugarse o entregarse finalmente ella lo convence de confesar.
Acá se ve una novela psicológica en todo su esplendor, cada personaje con su personalidad y propios tormentos, nos deja una gran lección, siempre pensar lo que hacemos, ya que si no es ni la justicia ni la sociedad, la conciencia es la más castigadora que hay. La novela es de suspenso muy tenso y te deja hasta sin aliento, sobretodo en las conversaciones de Raskolnikov y los policías. Esta obra es un clásico que todo amante de la lectura debe leer y que no debe faltar en el repertorio de libros leídos
Valoración: 10/10